Una experiencia muy agradable. La amable recepcionista me saludó a mi llegada. Me dieron una toalla, una manta de tela, sandalias y un casillero. Mientras recorría los tres pisos, encontré dos piscinas, una pequeña y caliente, otra fresca y más grande, dos baños de vapor, uno caliente y otro muy caliente y una sauna seca, también caliente. También había muchas duchas en todos los niveles, una zona de relajación, un cuarto oscuro, una sala de vídeo y una zona para fumadores. Parecía que se podían alquilar habitaciones pequeñas, limpiadas después de cada uso, con camas y sábanas adecuadas. Se venden snacks y bebidas, pero hay un dispensador de agua de uso gratuito. En cuanto a la clientela, hay un rango de edades, desde jóvenes hasta mayores, sesgado hacia los más jóvenes. En general una experiencia muy agradable.

La atención en recepción es pésima, el chico es socio del dueño, y es muy maleducado. Si le pides un condón extra, te mira con cara de fastidio. Las instalaciones son viejas, todo con olor a humedad, sandalias mojadas y mal olor. apesta Nada que ver con otras saunas de Santiago. Caro y malo.

Pésima, muy mala atención de la recepcionista que está de turno hoy 2 de enero 2022 a las 8:00 pm. Te empiezan a prender las luces indirectamente para que te vayas y cuando preguntas te dicen de mala manera... TE DIJERON QUE TE SALGAS. Yo por mi parte nunca voy y sobre todo cobran muy caro.

Si preguntas o indicas algo, inmediatamente te invitan a salir del lugar diciendo "puedes irte si quieres".